Anillo del maestrazgo y morella

Partieron de gea de albarracin en busca de teruel, cabalgaron por pistas rápidas con vistas esplendidas y en lo que canta un gallo llegaron, casi sin bajarse sellaron su salvo conducto y prosiguieron su cabalgar que se vio interrumpido por una via verde que les obligo a investigar una alternativa para rodearla, tras muchas vueltas y alguna trialera de la muerte consiguieron subir a unos molinos y desde allí enlazar con la carretera en busca del anillo del maestrazgo y morella, que era la ruta que tenían prevista seguir los próximo dos días.

Que tierras mas bonitas, por paisajes, por sus pueblos en los que tenían que parar en cada esquina para ver con detalle los encantos que encierran, pero una cosa que les impresionó fueron sus carreterillas de tercer o cuarto orden y sus millones de curvas con sus subidas y bajadas de escandalo que les hicieron disfrutar cada metro recorrido. bien es verdad que disponiendo de tiempo se pueden descubrir cientos de pistas para enlazar estos pueblos, como se empeñaban en comentárselo la mayoría de personas que se interesaban por su viaje, incluso algún alcalde se ofreció para mostrarles la pista que salia su pueblo hasta el pueblo siguiente, pero el tiempo se les echaba encima, la tarde caía y empezaba a refrescar ya que rodaban siempre sobre los mil metros de altitud.

Pasadas las nueve de la noche llegaron a morella, la cumbre de este viaje, sin tiempo para celebrarlo prosiguieron hasta chiva de morella, donde tenían previsto pernoctar, no sin antes tener que buscarse la vida para cenar ya que el bar estaba cerrado y no había nada mas, gracias a la amable empleada de la casa rural consiguieron algo de pan, de charcuteria y vino para acompañar y celebrar que estaban en morella.

Al día siguiente prosiguieron recorriendo los anillos mencionados hasta que completaron los circulos y toco buscar donde dormir y pensar que ruta hiban a escoger para vajar, el alojamiento resultaba dificil, por lo que decidieron salir a la aventura y buscar por el camino, habian decidido bajar a almeria y volver por campo sevilla, pero a ala altura de valencia jimena le dijo a rodrigo que porque no tiraban para villarrobledo, pegarse un homenaje para celebrar una vez mas el viaje y bajar abriendo ruta a sevilla, no lo dudaron y asi lo hicieron.

No les fue fácil llegar, la climatología empeñada en ser protagonista en este viaje, les acompaño con un fuerte viento lateral y lluvia hasta llegar a villarrobledo, donde les esperaba su rincón favorito al lado de la chimenea y con una buena parrilla siempre acompañados de un buen vino para brindar por todo lo que se pueda.